Estados Unidos revoca visas a seis personas por mensajes contra Charlie Kirk; cuatro son latinoamericanas

Washington, 16 de octubre — El Departamento de Estado de Estados Unidos informó la revocación de visas a seis personas extranjeras, cuatro de ellas originarias de América Latina, tras publicar en redes sociales mensajes que celebraban el asesinato del activista ultraconservador Charlie Kirk, ocurrido el pasado 10 de septiembre en Utah.

A través de la red social X, el gobierno estadounidense justificó la medida señalando que “Estados Unidos no tiene ninguna obligación de acoger a extranjeros que desean la muerte a estadounidenses” y añadió que continuará identificando a titulares de visados que difundieron mensajes celebrando el homicidio de Kirk.

Entre los sancionados se encuentran un argentino, un mexicano, un brasileño y un paraguayo, además de un alemán y un sudafricano. Según el Departamento de Estado, los mensajes en redes incluyeron expresiones ofensivas y celebratorias del crimen. En algunos casos, los usuarios describieron a Kirk como “racista” o “misógino”, y otros afirmaron que su muerte hacía “del mundo un lugar mejor”.

La dependencia reiteró que tanto el presidente Donald Trump como el secretario de Estado Marco Rubio se comprometieron a “defender las fronteras, la cultura y a los ciudadanos del país haciendo cumplir las leyes migratorias”.

“Los extranjeros que se aprovechen de la hospitalidad estadounidense celebrando el asesinato de nuestros ciudadanos serán expulsados”, añadió el comunicado oficial.

El asesinato de Charlie Kirk

Charlie Kirk, de 31 años, fue asesinado durante un evento al aire libre en un campus universitario de Utah. El presunto responsable, identificado como Tyler Robinson, de 22 años, fue detenido poco después del ataque.

Kirk era una figura influyente dentro del movimiento “Make America Great Again” (MAGA) y uno de los principales promotores del trumpismo. Tras su muerte, el presidente Trump le otorgó de manera póstuma la Medalla Presidencial de la Libertad, mientras que su funeral en Arizona reunió a más de 100 mil asistentes, incluidos funcionarios de alto nivel del gobierno estadounidense.

El caso ha reavivado el debate sobre los límites de la libertad de expresión en redes sociales y las medidas del gobierno para sancionar a extranjeros que promuevan o celebren actos de violencia.

Deja un comentario

Tu dirección de correo electrónico no será publicada. Los campos obligatorios están marcados con *